Como estoy a la espera de recibir piezas para continuar con el montaje de los motores de 150 S y 125 N, no pude avanzar en ellos y, para matar el gusanillo, me dediqué a limpiar los cárteres de un motor de Vespa Sprint, que me agencié hace tiempo con el objetivo de incorporarlos a un motor análogo que los traía dañados.
No es que estuvieran especialmente sucios (los tengo en peor estado) pero necesitaban un lavado de cara.
En estas primeras instántaneas podéis ver su estado inicial.
Y aquí podéis ver cómo quedaron después de pasar por gasolina, brocha y un buen estropajo de acero inoxidable.
Sólo queda desmontar los dos rodamientos que se ven, del eje de la rueda, tanto el del lado del tambor de freno como el del lado del cangrejo del cambio.
Montar, asimismo, retenes y rodamientos del cigüeñal y ya están listos para recibir el resto de piezas del motor.
2 comentarios:
huuuuy, no me creo nada, eso son dos motores distintos. Hagamos una cosa, te llevo el mío con más mierda que el palo de un gallinero, a ver si es verdad que lo dejas tan limpio.......;DDD bueno, que quieres, tenía que intentarlo, jajaj
Como siempre buen un trabajo fino, fino.
Es mucho más fácil limpiar bien un motor cuando lo tienes en el banco que cuando está en la moto, te lo aseguro, tendrías que ver el aspecto del motor de mi 200, da pena verlo...
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